Todo comenzó en un móvil de televisión, cuando entrevistaban a diferentes personas en la previa del partido amistoso de la selección Argentina contra Panamá y la fiesta por haber logrado el campeonato del mundo. La mujer fue consultada por el cronista y ella misma reconoció que había presentado un certificado de enfermedad trucho. Terminó quedándose sin trabajo.
«¿Qué dejamos para venir a ver a la Scaloneta?», preguntó el movilero. «El laburo», contestó la joven. «Soy de Rosario y de Central, un saludo a mi jefe Roly de Funes. Se está enterando por la tele. Al lugar llegó un certificado médico que decía que estaba con una diarrea», contó. «Mágicamente aparecí en el Monumental. Ya estoy bien, estoy joya», ironizó.
«Nosotros nos enteramos por las redes sociales. Nos causó una sorpresa y lamentablemente tomamos la decisión de separarla del cargo. Ya fue despedida. Se comunicó verbalmente y el primer día hábil se le va a notificar fehacientemente que ya no pertenece más al equipo de la Municipalidad», informó Martín Pappini, secretario de Gobierno de Funes.
