Las últimas 24 horas estuvieron marcadas en Rosario por tres hechos violentos. Tres homicidios, en distintas circunstancias, sacudieron a tres zonas de la ciudad.
Miércoles 17. 23:30 hs. Castellanos y Dr. Riva
Martín Alberto Vera de 40 años tomaba mates en la puerta de su casa con un amigo. La tranquilidad de esa escena cotidiana se vio violentamente interrumpida por los estruendos de una balacera. Dos hombres que se desplazaban en moto dispararon contra Martín, quien quedó tendido en la vereda con varios disparos en la cabeza, abdomen y piernas.
Jueves 18. 01:30 hs. Casilda y Formosa
Mario Esusy de 61 años trabajaba para el servicio de radiotaxis 380 mil. A la 01.30 había decidido tomar un viaje solicitado a través de un llamado en Casilda al 1900. Al llegar al lugar le costó encontrar la dirección indicada, pero mientras buscaba, dos o tres delincuentes en moto se le acercaron y se le pusieron a la par de su taxi con intenciones de robo. Según las pericias, Mario tuvo algún forcejeo con los ladrones (ya que presentaba un golpe en la cara) e intentó acelerar para escapar del lugar. Sin embargo no lo logró ya que recibió un disparo en la cabeza que le ocasionó la muerte de manera inmediata.
Esta muerte generó un fuerte repudio de sus compañeros, familiares y amigos, quienes, durante varias marchas y manifestaciones a lo largo del día, expresaron el enojo y cansancio por la inseguridad y las promesas que nunca se cumplen.
Jueves 18. 11.:30 hs. Mendoza y San Martín
Miguel Ángel Gómez hacía años que tenía su joyería «Nefertiti» en Mendoza al 900. Cerca del mediodía su hija lo llamó y como no conestaba su teléfono celular decidió ir hasta el local. Allí se encontró con la peor escena. Su padre estaba tendido en el suelo, dentro del comercio, con varias manchas de sangre a su alrededor. En un primer momento el fiscal Adrián Spelta había señalado que no se hallaron signos de violencia ni disparos, tampoco faltaba nada del local a simple vista. Sin embargo, más tarde, los peritos pudieron determinar que tenía un puntazo en la zona del cuello, lo cual le habría provocado la muerte. El principal sospechoso por el hecho, es un hombre conocido por la víctima, quien además está relacionado con un grupo delictivo conocido como «La banda de los palieres», ya que se dedicaban a robar en edificios.
Ya son 55 los homicidios en Rosario en lo que va de 2019.
